Hace alrededor de 9 años, unos cuantos meses después de que mi familia y yo llegamos a vivir a la ciudad de Reynosa, recibí una llamada telefónica de un pastor a quien precio, y el motivo de la llamada era extenderme la invitación a participar en una Asociación Civil de la IMMAR, llamada “Manos Juntas México”. Francamente había escuchado un poco de esa institución, pero no conocía realmente el trabajo que realizaba.
Soy pastor metodista, y nuestra denominación, ademas del trabajo religioso que realiza diligentemente a lo largo de prácticamente todo el país en cientos de templos y puntos de predicación, cumplimos con nuestro compromiso social, realizando acciones tendientes a la mejora de la vida de las comunidades donde nuestras iglesias se encuentran fundadas. Es a través de instituciones de asistencia social que cumplimos con ese compromiso social, y Manos Juntas Mexico A.C., es una de ellas. Se encuentra ubicada en Rio Bravo Tamaulipas, y es probablemente una de las instituciones metodistas en México cuyo abanico de trabajo es bastante extenso. Entre los proyectos que realiza se encuentran: construcción de casas para personas de bajos recursos, establecimiento y desarrollo de centros comunitarios enfocados en la educación, estancias infantiles, educación para adultos y niños, centros medicos con atención de primera calidad en medicina general y dental, construcción de proyectos de mejora para iglesias locales, y desde hace 5 años la construcción y operación de la Casa Hogar Esperanza, en Progreso Tam.
Durante aproximadamente 8 años colaboré en esta institución, pero durante los ultimos 5 años me desempeñé como Presidente del Consejo de Administración de Manos Juntas México. Cinco años durante los cuales aprendí mucho acerca de esta labor que la iglesia debe cumplir y su responsabilidad con la sociedad. Demasiadas anécdotas, muchas decisiones que tomar, muchos factores que considerar a la hora de definir proyectos, pero sobre todo, mucha gratitud. Gracias a mi pastor, el Obispo Jose Antonio Garza, al Consejo de Administración, que queda dirigido por el Pbro. Jose Luis Treviño, y gracias especiales al Ing. Guillermo Berman: Willy, no tengo mas que gratitud por la oportunidad de trabajar contigo, y por cada conversación, cada chiste, cada anécdota, cada llamada; ha sido un privilegio compartir esta responsabilidad junto contigo, y espero con fe que Dios va a seguir a cargo de Manos Juntas México.
Hasta pronto Manos Juntas México.
Hugo A.
